Nació en Alcantarilla el día 18 de diciembre de 1897. Hijo de una familia modesta, siendo él, el tercero y menor de ellos. Fue monaguillo en la iglesia de las hermanas salesianas del sagrado corazón de Jesús.
A los 12 años, ingresó en el seminario de san Fulgencio de Murcia donde fue ordenado sacerdote en junio del 1923.
Las gentes que lo conocieron lo definen como un hombre sencillo, humilde y bondadoso.
D. Juan fue un sacerdote sencillo, un hombre radicalmente bueno, un cristiano de gran corazón, alguien que no se sentía ni por un instante superior a los demás.
Todas las parroquias por las que pasó (Murcia, Molina, Lorca) dan la misma noticia: D. Juan Sáez era un santo, y para mucha gente que le conocía, D. Juan Sáez fue un hombre coherente y auténtico. Desde esa actitud fundamentalmente tomó en serio el Evangelio. Por eso fue religioso, sensible, comprensivo, justo, consecuente, trabajador, bondadoso y sencillo.
De su cálida sencillez brotó un estilo de vida que dejó tras de sí el buen olor de Cristo por donde quiera que pasó.
Don Juan Sáez Hurtado realizó trabajos como la construcción de la iglesia de San Juan Bautista.
También ayudaba a la gente que tenia problemas económicos y con graves enfermedades.
Él pedía dinero a los más ricos para después dárselo a los más pobres.
Cuando había una persona con una enfermedad muy grave el iba a visitarlo y a decirle que confiara en Dios.
PUEDES PUBLICAR ALGUNA GRACIA POR LA INTERCESIÓN DEL SIERVO DE DIOS JUAN SÁEZ EN NUESTRO LIBRO DE VISITAS Y SERÁ REMITIDA AL POSTULADOR DE LA CAUSA DE BEATIFICACIÓN.
